Paris es una de las ciudades más visitadas del mundo; cada año recorren sus calles alrededor de 26 millones de turistas extranjeros.
Y las razones no son pocas; París cuenta entre sus atracciones destacadas con más de 150 museos, entre ellos el Louvre, uno de los más importantes a nivel mundial, con sitios de excepción, como los Campos Elíseos o la Torre Eiffel, obras monumentales que dejan sin aliento, como el Arco de Triunfo o las que impactan por vanguardistas, tal el caso del Centro Pompidou.
Lo que atrapa de París es precisamente esa armonía entre lo antiguo y lo moderno, entre la naturaleza que despliega su belleza en sus exquisitos parques y jardines y la aparente frialdad de la piedra, que tallada en miles de formas no hace más que complementar tanta belleza.